Somos criaturas sociales. Nuestro estado de ánimo, comportamiento y decisiones de vida están muy influenciados por los demás. Nos esforzamos por conseguir amor, amistad y compañía, y sufrimos cuando no...
Somos criaturas sociales. Nuestro estado de ánimo, comportamiento y decisiones de vida están muy influenciados por los demás. Nos esforzamos por conseguir amor, amistad y compañía, y sufrimos cuando no los obtenemos.
Cuanto mejor sea su vida social, mejor será su salud mental, sus perspectivas profesionales e incluso su salud.
Es lógico que queramos hacer todo lo posible por mejorar nuestra vida social, y aunque algunas de las soluciones son claras y obvias (unirse a grupos, empezar un pasatiempo, etc.), otras no lo son tanto. Por ejemplo, hay muchas maneras en las que simplemente tener los dientes más blancos puede mejorar nuestra vida social.
Todos hacemos juicios rápidos cuando vemos a alguien por primera vez y se dice que 4 de cada 10 notarán una sonrisa antes que nada.
Una sonrisa dice mucho sobre alguien y, en lo que respecta a las primeras impresiones, es un arma esencial para transmitir tu verdadera naturaleza. Si tus dientes están amarillos, eso sugiere mala salud, tabaquismo, alcoholismo y mal aliento. Puede que esas cosas no sean ciertas, pero las primeras impresiones se forman de manera inconsciente, por lo que no tenemos tiempo de analizar si son ciertas o no.
Cuanto más blanca sea tu sonrisa, más fácil te resultará hacer nuevos amigos, encajar en nuevos círculos de amistad e incluso encontrar pareja.
Muchas personas solitarias se encuentran en esta situación porque carecen de confianza en sí mismas y de seguridad en sí mismas. Tienen el deseo de hacer amigos y pueden ser comunicativos, amigables y seguros detrás de una pantalla de computadora, pero cuando están en el mundo real, se alejan de la interactividad y sufren como resultado.
Hay Muchos estadounidenses se encuentran en esta situación que sufren en su vida social y en su carrera porque no tienen la confianza para sonreír.
Es la realidad. Nuestros ojos se sienten naturalmente más atraídos por una sonrisa más blanca. Son como una moneda brillante que simplemente llama la atención.
Debido a que las sonrisas más blancas atraen la mirada, una sonrisa más blanca también llama la atención. Una sonrisa blanca y brillante es simplemente más atractiva.
A medida que las personas se sienten más atraídas por nosotros, les sonreímos más a cambio de su atención.
Una sonrisa más blanca es más atractiva en sí misma. Y, como sus dientes más blancos le harán sonreír más, esto le dará muchas oportunidades de mostrarlos.
Sonreír más también te hará parecer más atractivo para tus posibles amigos y parejas. Te mostrarás como el tipo de persona con la que a la gente le gusta estar y como alguien que también se divierte.
Los dientes más brillantes también son una señal de que cuida su salud y apariencia general, lo que seguramente otros encontrarán atractivo.
Ver para creer. Y lo que vemos afecta directamente nuestra percepción. Por eso, cuando vemos una sonrisa blanca y bonita, normalmente la percibimos como una señal de confianza.
Cuando una persona tiene dientes blancos y radiantes, tiende a querer que la gente los vea, especialmente si nos hemos esforzado mucho para tener esa sonrisa blanca. Una sonrisa blanca aumenta nuestra confianza en nosotros mismos de maneras que son evidentes para quienes nos rodean.
Esto significa que a los ojos de la gente pareces más seguro de ti mismo. Más confianza se traduce en mayor capacidad. Eso hace que te sientas aún más seguro.
¿Quién no es más sociable cuando se refuerza su confianza?
¡Cuanto más sonríes, más amigable pareces y más accesible eres como resultado!
Tu sonrisa puede ser una de las principales razones de esto. Si tienes los dientes amarillos, estarás menos inclinado a mostrarlos. Puede que te avergüences de ello, en cuyo caso desarrollarás medias sonrisas, asentirás y tratarás de sonreír como una forma de mostrar tus sentimientos a los demás.
Esto puede parecer un sustituto aceptable para usted, pero para otra persona, muestra falta de interés, falta de apertura y eso daña las relaciones.
¿Alguna vez has intentado sonreír más intencionalmente? Cuando sonríes más, te sucede algo: tu actitud cambia.
El acto de sonreír regularmente no solo cambia la forma en que los demás te ven, sino que cambia la forma en que los ves.
Los dientes más blancos significan más sonrisas. Más sonrisas conducen a una mejora en el estado de ánimo. ¿Un potenciador natural del estado de ánimo? Sí, por favor.
¿Adivina a quién más le gusta alguien de buen humor? Ummm… otras personas. A otras personas les gusta estar cerca de alguien de buen humor.
El buen humor es contagioso. Por eso, cuando esa buena vibra que emanas de una gran sonrisa entra en contacto con otras personas, puedes adivinar lo que sucede. ¡También mejora su estado de ánimo!
Somos criaturas sociales. Piensa en lo que sucede cuando un bebé te sonríe en el supermercado. Tú le devuelves la sonrisa. (Si no le devuelves la sonrisa a un precioso bebé, se te congela el corazón. ¡Sonríeles a esos bebés!)
¿Y cómo te sientes cuando intercambias sonrisas? Nuestros cuerpos responden liberando hormonas de la felicidad. (A menos que sea una sonrisa espeluznante. En ese caso, te das la vuelta y corres. En serio. Aléjate).
La sociedad moderna es un poco vanidosa, todos lo sabemos, pero eso no es necesariamente algo malo. Nos enorgullecemos de nuestra apariencia y, si tenemos en cuenta que lucir bien suele ser el resultado de una buena alimentación y de un buen cuidado personal, es una actitud saludable.
También es algo que nos obsesiona con la belleza. Si tienes unos dientes perfectamente blancos, recibirás muchas preguntas sobre ellos, llamarás mucho la atención y podrás entablar conversaciones fácilmente con posibles amigos y citas.
Ya sea que sea una persona tímida por naturaleza o la persona más segura de sí misma en la sala, siempre es más fácil hacer amigos cuando no es usted quien rompe el hielo.
El envejecimiento hace que el esmalte se vuelva más fino y la dentina se vuelva mucho más oscura, lo que le da a los dientes un aspecto amarillento. Nuestros dientes también acumulan manchas a medida que envejecemos que contribuyen al tono amarillento.
Asociamos los dientes más blancos con una buena salud bucal y vitalidad. En otras palabras, una persona automáticamente parece más joven cuando su sonrisa es blanca y brillante.
Cuando nos sentimos y nos vemos más jóvenes de lo que somos, tendemos a ser más habladores y definitivamente más sociables.
Por último, pero no menos importante, una sonrisa más blanca puede prolongar su vida, permitiéndole disfrutar más de ella, conocer más gente nueva y tener relaciones más emocionantes.
Se dice que la soledad es como mortal como la obesidad (y en realidad puede serlo) una causa de obesidad) y también puede conducir a una mayor riesgo de abuso de sustancias y suicidio. Y cuando tu salud mental es buena, tienes confianza, lo que tiene un efecto Impacto positivo en su sistema inmunológico y su salud cardiovascular.
Cuanto más cuide sus dientes, mejor será su salud bucal, lo cual es importante si tenemos en cuenta que la enfermedad de las encías está relacionada con una mayor riesgo de enfermedades cardíacas, diabetes y Alzheimer.
Incluso el simple acto de sonreír más Podría añadir años a tu vida y, como ya hemos comentado, cuanto mejor sea tu salud bucal y más blancos tus dientes, más inclinado estarás a sonreír.
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